El juego simbólico es una manera de jugar en los niños importantisima, quizá no nos demos cuenta pero nuestros hijos juegan a esto a diario. Os cuento que es el juego simbólico, beneficios y como fomentarlo con acciones y juguetes.
¿Qué es el juego simbólico?
El juego simbólico es una actividad infantil espontánea en la que los pequeños imaginan ser o hacer cosas que han visto en la vida real, representando situaciones que se imaginan, fantaseando…
A través de esta representación los niños aprenden a asimilar y comprender el mundo que les rodea. Lo hacen mediante el habla, contando todo lo que van haciendo, lo que ayuda al desarrollo del lenguaje y hace que sea un juego que inicie la sociabilizacion con otros niños.
Este tipo de juego empieza a los 2 años aproximadamente, antes los niños están conociéndose a sí mismos y conociendo su entorno y a los dos años ya van siendo capaces de comprenderlo y de crear símbolos.
El juego simbólico no solo es que el niño fantasee haciéndose pasar por el padre o por el panadero, sino que también es ser capaz de jugar haciendo ver que una piedra es un trozo de pan, que está hoja caída del árbol es un mapa del tesoro, fingir que está durmiendo, o que este cartón del rollo de papel higiénico es un catalejo.
El juego simbólico ayuda a desarrollar la capacidad de abstracción, representarlo que tienes en la mente como si estuviera aquí, y eso les ayuda a usar la mente de manera diferente.
Gracias al juego simbólico podemos también conocer los sentimientos o el estado de ánimo de los niños. Quizá no les guste contarlo abiertamente pero jugando sí son capaces de expresarlo.
El juego simbólico y Piaget
Jean Piaget uno de los psicólogos más importantes en relación a la infancia, asocia tres estructuras básicas del juego con las fases evolutivas del pensamiento humano: el juego es simple ejercicio (parecido al anima); el juego simbólico (abstracto, ficticio); y el juego reglado (colectivo, resultado de un acuerdo de grupo).
Piaget divide el desarrollo cognitivo en cuatro etapas: la etapa sensomotriz (desde el nacimiento hasta los dos años), la etapa preoperativa (de los dos a los seis años), la etapa operativa o concreta (de los seis o siete años hasta los once) y la etapa del pensamiento operativo formal (desde los doce años aproximadamente en lo sucesivo).
Durante la segunda etapa, la etapa preoperativa el niño representa el mundo a su manera (juegos, imágenes, lenguaje y dibujos fantásticos) y actúa sobre estas representaciones como sí creyera en ellas.
Beneficios del juego simbólico
A continuación pongo en una lista beneficios que ya he nombrado sobre este tipo de juego en los niños:
- Ayuda al desarrollo del habla
- Mejora el desarrollo mental del niño
- Ayuda a conocer mejor el mundo donde viven
- Aprenden a ponerse en la piel de otras personas
- Comienzae el juego con otros niños
- Desarrolla la imaginación
8 Juegos simbólicos para vuestros hijos
Venden juguetes monísimos de juego simbólico, pero realmente con cualquier material los niños pueden crearse una historia, por lo que de entrada no hace falta hacer desembolso para fomentar el juego simbólico:
1. Jugar a hacerse el dormido: los primeros juegos simbólicos son tan sencillos como esto, hacerse el dormido, hacer que habla por teléfono, hacer que come comida inventada, jugar con cajas de cartón…
2. Jugar al restaurante: Esto puede implicar desde ir a hacer la compra, cocinar, servir platos, pagar… Cada vez el niño o la niña pueden adoptar un papel diferente en la historia. Las cocinitas son ideales para que pasen horas y horas jugando a ser cocineros.
3. Jugar a los médicos: No he visto juego más cómodo cuando yo soy la enferma ?, además se puede aprovechar para que aprendan la importancia de las temidas vacunas, y que se vaya el miedo a ir al médico.
4. Jugar a limpiar y recoger: Este fue el primer juguete simbólico que tuvo mi hija, además le ayudó en los primeros pasos. Les suele gustar cogerlo a la vez que los adultos para verse que son colaboradores.
5. Mamás y papás: Los niños pueden jugar con los padres intercambiando roles, o con un bebé de juguete al que pueden alimentar, cuidar, pasear… Igual que hacen los papás con el bebé (ideal este juego para enseñar a los niños como será tener un nuevo bebé en casa)
6. Jugar a arreglar: Todo niño desea coger un destornillador y un metro cuando ve a los papás arreglando algo. Ellos pueden ser los encargados de sus propias herramientas, y nosotros podemos dejarles colaborar en la medida de las posibilidades (y del riesgo que haya) cuando estemos arreglando algo.
7. Jugar a profesiones: Por ejemplo a profesores. A los 3 años los niños empiezan el cole. Muchas veces no les gusta contar que hacen en clase. Podéis jugar a ser el maestro o maestra y el alumno, y veréis como su manera de actuar es justamente la que ve en el cole de su profe.
8. Jugar a disfrazarse e inventarse nuevos personajes: Los disfraces no solo son para Halloween y Carnaval, podéis tener diferentes complementos de disfraces en un baúl, y cada día cambiar de personaje. Veréis lo que les gusta un disfraz.
Los juegos simbólicos que triunfan con mis hijos
La mayor ha jugado durante mucho mucho tiempo con Chichetas, su bebé, al que llevaba a todas partes quería, alimentaba y vestía (o desvestía) a todas horas. Le encanta disfrazarse, sobre todo con una careta de ratón, que ha llevado por casa, por la calle y hasta al colegio.
El pequeño ahora empieza con el juego simbólico, hace que come comida que le da su hermana, se hace el dormido, hace que cocina, se hace pasar por un bebé, a veces es médico… Su hermana le intenta disfrazar, pero no le gusta tanto como a ella.
El juego simbólico es una oportunidad divertidísima para jugar con nuestros hijos, ¿no os parece?
El juego simbólico es más importante que lo que nos podemos imaginar…nunca mejor dicho jejejej. Es una etapa fundamental por la que todo niño sano ha de pasar.
Aquí estamos encasillados con lo chequeos médicos y los disfraces de princesas. Que ya le podría entrar a mi bichilla ganas de cambiar a eso de ordenar y recoger, pero no le parece buen juego.
me ha servido grax